¿Sabías que el protector o bloqueador solar es tu mejor aliado antienvejecimiento?
Se debe usar todo el año y reaplicar cada 2 a 3 horas para ayudar a evitar el envejecimiento de nuestra piel: arrugas, manchas (léntigos) y flacidez.
Aunque estés en casa debes usarlo, pues las pantallas desprenden una luz que puede llegar a manchar y envejecer nuestra piel. Lo mismo si es un día nublado, los rayos de sol están ahí, solo que tenemos la sensación de que no están, lo que hace que nos descuidemos y nuestra piel sufra las consecuencias de esto.
Además, de proteger tu rostro, no olvides que debes aplicar el protector también en orejas, cuello, escote, brazos, piernas y manos. En manos y cuellos se notan los primeros signos de envejecimiento y eso ocurre porque nos olvidamos completamente de esas zonas de nuestro cuerpo.
Si eres de la que no te gusta sentir tu cara “pegote”, puedes reemplazar tu crema hidratante y usar directamente el protector solar o bien elegir uno en que tenga textura “fluida” o “water”.En el mercado existen varias opciones de formatos para que elijas el que más te guste: polvo, base compacta, crema, spray. Por ejemplo, si no quieres que afecte tu maquillaje, lo mejor es usar uno en formato polvo que actúa como un polvo translucido.
¿Usas protector solar a diario? ¿En qué formato?
Recuerda que para potenciar la eficacia de tu rutina facial, la piel debe estar limpia. En Ameiz tenemos servicios de limpieza facial profunda, en donde nuestras experimentadas cosmetólogas dejarán tu rostro limpio de impurezas y con una hidratación profunda
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