Como seres humanos transitamos por muchas etapas durante nuestra vida y dentro de estas etapas, una de las más importantes, está la adolescencia. Se deja la niñez y se transita hacia la vida adulta, todo esto acompañado de una avalancha de cambios físicos y hormonales.
Durante la adolescencia vamos cimentando el camino que queremos seguir en nuestra vida adulta, miramos ávidos los nuevos desafíos y retos que se nos van presentando durante el día a día, buscando encontrar respuestas a situaciones que durante nuestra niñez nos eran indiferentes.
Las hormonas se hacen notar en nuestros cuerpos: crecemos, salen vellos corporales, nuestra voz cambia y la cara regordeta infantil se va afinando. Nos enfrentamos a una nueva corporalidad que nos desafía a adaptarnos a nuevas dimensiones físicas y psicológicas.
Cambios físicos
- Piel: la producción de glándulas sebáceas aumentan, por lo que toda la piel del cuerpo está propensa a tener puntos negros, puntos blancos y granos. El rostro es la zona en donde mayor impacto tiene este cambio, el acné es una típica enfermedad dermatológica que se presenta durante esta etapa.
- Vellos: comienza al crecimiento del vello en todo el cuerpo. Se intensifican vellos que ya existían y aparecen en donde antes no existían, como en las axilas y zona púbica.
- Sudoración: comienza la sudoración más constante y excesiva, por lo que es necesario comenzar a usar productos específicos para esto, como desodorantes corporales y talcos.
- Voz: es algo que es más notorio en el género masculino, pero ocurre en todas las personas. Nuestra voz cambia, se torna menos aguda e infantil ¿te has fijado que existen voces típicas de niños y abuelos? Muchas veces solo con hablar por teléfono puedes darte cuenta más o menos la edad que tiene tu interlocutor.
Cambios psicológicos
Comienza una etapa de transición que permeará de manera trascendental el resto de nuestras vidas. Durante la adolescencia es muy importante reforzar la autoestima y la autoaceptación, evitando las comparaciones con otras personas.
Importante es que los padres o tutores de adolescentes hablen abiertamente de los cambios que van a experimentar, así dejan la puerta abierta para que ellos se acerquen en caso de inquietudes y dudas.
Según estudios, en esta etapa los principales conflictos psicológicos tienen que ver con la “lucha dependencia/independencia”, preocupación por el aspecto físico, integración con grupo de amigos y el desarrollo de identidad.
Cuida y valora cada etapa de tu vida
Como todas las fases que vivimos, la adolescencia tiene un tiempo finito. ¿Estás pasando por ella? vívela y apóyate de herramientas y personas que te ayuden en ese transitar.
Si notas cambios en tu piel, comienza una rutina de cuidados que te ayuden a minimizar esto: cremas que vayan enfocado en tu nuevo tipo de piel y protector solar. Si es algo es más severo, debes asistir a un dermatólogo para que puedan ver en conjunto una solución.
Desde esta etapa es importante comenzar con limpiezas faciales, así podrás extraer puntos negros y blancos que suelen aflorar con más fuerza durante esta edad.
En caso de que la aparición de algún vello corporal que no te guste, prueba quitándolos con técnicas que no sean definitivas, así puedes ir viendo que es lo que más te identificas y quieres para ti.
En Ameiz tenemos un amplio catálogo de servicios de belleza y bienestar para mantenerte fresca y renovada. Llegamos a tu hogar con nuestro protocolo de bioseguridad, para mantenerte y mantenernos seguros.